El final de Los 4 Fantásticos: Primeros Pasos culmina con un enfrentamiento monumental que no solo redefine el destino del equipo, sino que también abre puertas trascendentales para el futuro del multiverso.
La historia llega a su clímax cuando Galactus fija su mirada en la Tierra‑828 para tomar a Franklin Richards, el hijo de Reed y Sue, como su sucesor. Galactus lo convertiría en el recipiente perfecto para continuar su legado. El equipos se enfrenta a un terrible dilema: ceder al niño para salvar su mundo… o encontrar otra forma de enfrentar a una entidad que trasciende el tiempo y el espacio.
Lejos de aceptar el chantaje, los Cuatro Fantásticos deciden atraer a Galactus con una trampa. Mientras evacuaban Nueva York, Sue lidera el esfuerzo humanitario, Johnny busca conectar emocionalmente con el heraldo de Galactus —Shalla‑Bal—, y Reed desarrolla una tecnología capaz de abrir un portal interdimensional para desterrar a la amenaza. El plan es arriesgado, pero es lo único que tienen.
La batalla culmina en Times Square, donde el equipo intenta contener al titán cósmico. Sin embargo, la fuerza de Galactus demuestra ser aplastante: lanza a Ben al espacio, reduce a Reed a una sombra de sí mismo y se apodera de Franklin sin mucho esfuerzo. Sue se sacrifica al desplegar su máximo poder para contener al enemigo el tiempo suficiente. Shalla‑Bal interviene en el último segundo y arrastra a Galactus al portal, sellándolo desde el otro lado.
Sue colapsa por el uso extremo de sus habilidades y muere frente a su familia. Reed, roto, intenta reanimarla sin éxito. Entonces ocurre lo inesperado: Franklin, aún incapaz de hablar, manifiesta por primera vez su poder. De manera espontánea, el niño revierte la muerte de su madre, devolviéndola a la vida.
Así, los Cuatro Fantásticos emergen como héroes. La película cierra con un homenaje público y una nueva era para el equipo. Sin embargo el verdadero final llega después de los créditos.
Camino a Avengers: Doomsday
En la primera escena post-créditos, vemos a Sue años después, cuidando de un Franklin ya en edad escolar. Al regresar a su sala de estar, descubre que el niño ha sido visitado por una figura enigmática con capa y una máscara metálica: Victor von Doom, finalmente introducido en esta versión del MCU. La escena no necesita palabras para dejar claro que el destino del niño está ligado al próximo gran conflicto multiversal.
Todo apunta a que el futuro del multiverso se definirá en torno a ese niño. Y Avengers: Doomsday será el campo de batalla definitivo.