Atentos. Tras la serie Eco, la aclamada Deadpool & Lobezno y la próxima Blade protagonizada por Mahershala Ali y el episodio spin-off de la miniserie Marvel Zombies What If?, hay otro espécimen en el Universo Marvel preferiblemente apto para un público más maduro. Se trata de Kraven the Hunter, historia de origen de un histórico villano de Spider-Man perteneciente a la costilla de Sony del Spider-Verse.
Creado por Stan Lee y Steve Ditko, el personaje apareció por primera vez en 1964 en The Amazing Spider-Man como adversario de Spider-Man. Desde entonces se ha convertido en uno de los enemigos más formidables de Spider-Man, y se ha unido al escuadrón de supervillanos hostiles al superhéroe vestido de arácnido. Kraven, nacido Sergei por ser ruso e hijo del oligarca del crimen Nikolai Kravinoff, de quien heredó una pasión compulsiva por la caza, también tiene un hermanastro, el Camaleón, y es uno de los miembros fundadores de los Seis Siniestros. En su primera aparición, Kraven se refiere a Spider-Man como «la caza más peligrosa», dejando claras sus intenciones desde el principio, siendo esta una referencia directa a la historia de Richard Connell de 1924 del mismo nombre, en la que el Conde Zaroff, él mismo un cazador ruso, después de depredar cualquier animal sobre la faz de la Tierra practicaba la caza humana por deporte. Del mismo modo, Kraven, tras coleccionar todo tipo de presas, identificó a Spiderman como el único espécimen que merecía la pena cazar.
Al tratarse de una historia de orígenes, en el momento de escribir estas líneas se desconoce si Spider-Man hará acto de presencia o cómo, aunque en un momento del tráiler (muy sabroso, dada la cantidad de hemoglobina derramada y varios asesinatos virtuosos repasados), Kraven, interpretado por Aaron Taylor-Johnson (Tren bala; Vengadores: La era de Ultrón; Nosferatu), ve cómo decenas de arañas descienden de los árboles de un bosque desenrollando sus telarañas. ¿Será una premonición de lo que vendrá más adelante? Lo cierto es que parte de la historia de la película tiene que ver con la conflictiva relación entre el protagonista y su padre (interpretado por Russell Crowe), hacia el que vierte su sed de venganza que le convertirá en el mayor y más temido cazador del mundo. La otra parte estará dedicada a la guerra fratricida contra su hermanastro Camaleón (Dmitri Smerdyakov) y otros temibles enemigos como Rino (Alessandro Nivola) y el Forastero (Christopher Abbott).
Después de protagonizar Kick-Ass, luego Godzilla y de nuevo Los Vengadores, Taylor-Johnson pensaba que había terminado definitivamente con este tipo de películas. «Realmente no me interesaban», había dicho hace un año cuando parecía que la película se estrenaría en 2023, pero por diversas razones, entre ellas la famosa huelga que movilizó a la industria de Hollywood, se deslizó hasta hoy. «En ese momento sólo quería estar con mis hijos. No quería que me alejaran de ellos. Probablemente no estaba preparada para estar en esa posición, era demasiado pronto y, en general, hasta me importaba un bledo. No puedes meterte en un papel así con una actitud de ‘a ver qué tal’. Tienes que estar mentalmente preparado para lo que pueda pasar. Y como creo que ahora tengo confianza, estoy contento de afrontarlo». También vio algo especial en Kraven, algo único y concreto: «No habría firmado si no sintiera que había algo que dar vida con este personaje. Es un depredador supremo, la cima de la cadena alimenticia. Kraven es un cazador, no un cazador furtivo. Como cualquier cazador, sabe que a veces es necesario sacrificar a la manada para mantener el orden. Por supuesto, cuando empieza a aplicar este concepto a los humanos, la historia se vuelve bastante oscura.
En una entrevista concedida a la edición internacional de Rolling Stone, Aaron Taylor-Johnson ha explicado que uno de los factores que le atrajo del papel fue su principal fuente de inspiración en los cómics, a pesar de que no es un lector habitual de cómics, concretamente la historia titulada La última cacería de Kraven, en la que su personaje saca lo mejor de Spider-Man y luego casi se suicida por despecho. «Uno piensa: ‘¿Qué coño acabo de leer? ¿Es este el tipo de personaje que estoy interpretando?». Aunque está claro que, como Sony quiere lanzar una serie de películas protagonizadas por Kraven, es muy probable que la película no acabe igual.
Dirigiendo Kraven no está uno de los muchos operadores del estudio, sino un aclamado autor como J.C. Chandor. Chandor, cuyo debut en 2011 con Margin Call (un trepidante thriller económico ambientado en las 24 horas previas al crack financiero de 2008) aún se recuerda con agrado, y que luego continuó su carrera con unas pocas pero sagaces películas en las que confirmó su talento (la cinta de supervivencia náutica con Robert Redford Todo está perdido y la policíaca 1981: Una investigación en Nueva York con Oscar Isaac y Jessica Chastain). Es el propio Chandor quien advierte que Kraven-The Hunter no será un cinecomic como los demás: «Probablemente Sony no quiera que marque el camino, pero la historia es una tragedia. Cuando pasen los créditos, si has estado atento, tendrás la sensación de que no ha terminado de la mejor manera. Aparte de eso, hemos construido algunas set pieces y acción de las que estoy superorgulloso: no se trata sólo de Kraven. Tenemos la oportunidad de sumergirnos en los personajes de Marvel».
Entre ellos, sobre el que sin duda hay mucha expectación es Rhino, el hombre-rino. Lo interpreta Alessandro Nivola, que de esta forma vuelve a trabajar con Chandor tras 1981: Investigación en Nueva York. Esta es su opinión sobre Kraven: «Todas estas películas siguen una fórmula determinada, pero J.C. dijo que quería rodar todo a partir de la vida. Incluso la capacidad física de los personajes está más relacionada con la realidad. No hay gente volando ni nada parecido. J.C. describió mi personaje como el atleta olímpico más increíble de la historia. Además, el papel era una verdadera oportunidad de actuación para mí. Ya lo verán. Es un gran papel lleno de introspección, y no tuve que usar CGI. Nada de pantalla verde. Sólo me transformo físicamente en los momentos finales de la película, así que es un papel de villano clásico. Su psicología y su historia personal eran muy interesantes, complejas, y como hay un salto temporal en la película, mi personaje cambia mucho respecto a cómo se le ve al principio de la película’.
Sólo el tiempo dirá si Kraven -The Hunter allanará el camino para una franquicia interconectada de Spider-Man. El entusiasmo de Taylor-Johnson es un buen augurio, aunque no le faltan dificultades: «Encargarse de una película de Sony/Marvel es un reto diferente. Sí, está la historia, el personaje, el papel, y eso es una cosa. Pero luego entras en un mundo en el que estás tratando con un estudio y una franquicia, o posibles franquicias. Así que, en cierto modo, es como si tiraran los dados sobre mí. Es bonito, pero tienes que complacer al estudio, al público, y luego hacer lo que es decente para ti como actor. Para mí es todo un reto».
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