La música de Tiburón sirve últimamente no sólo para alertarnos del peligro de acercarse a los animales, sino también de algunos comentarios del actor de la película, Richard Dreyfuss. Tras sus tajantes palabras sobre las nuevas normas de inclusividad en los Oscar, la estrella causó revuelo en un reciente acto al que asistió.
Al asistir al Cabot Performing Arts Center de Beverly (Massachusetts) para una proyección de la película de Steven Spielberg, Richard Dreyfuss hizo algunos comentarios considerados sexistas y homófobos, lo que provocó que varios miembros del público abandonaran la sala. "Nos fuimos durante la entrevista junto con otros cientos de personas debido a sus desplantes homófobos, misóginos y racistas", se escribió en la página del centro.
Dreyfuss supuestamente hizo comentarios ofensivos sobre las mujeres y, en particular, sobre Barbra Streisand, coprotagonista de la película Crazy (1987). Dijo que las mujeres de la película eran pasivas y que por eso la película «apestaba». También habría calificado al propio Steven Spielberg de «genio, pero idiota».
Lo peor, sin embargo, fue cuando habló de la transexualidad: "Literalmente insultó a todas las mujeres. Luego insultó a los niños transexuales, ni siquiera puedo decir lo horrible que fue", escribió un usuario en X, según informa The Independent. Sobre el tema, supuestamente dijo que no había que escuchar a los niños de 10 años si decían que se identificaban con un género distinto al de su nacimiento.
En ese momento, el público empezó a abuchear a la estrella de Tiburón y muchos se marcharon. El propio Centro de Artes Escénicas Cabot comentó el incidente en un comunicado de disculpa: «Somos conscientes y compartimos seriamente las preocupaciones tras el reciente evento con Richard Dreyfuss», se lee: «Las opiniones expresadas por Dreyfuss no reflejan los valores de inclusión y respeto que defendemos como organización. Lamentamos profundamente las molestias que esto ha causado a muchos de nuestros clientes».
Y añadieron: «Lamentamos que un acto que debía ser una conversación para celebrar una película emblemática se convirtiera en una plataforma de opiniones políticas. Asumimos toda la responsabilidad por el descuido de no prever el rumbo de la conversación y por las molestias que esto ha causado a muchos clientes».