El director de Los Cuatro Fantásticos: Primeros pasos, Matt Shakman explica por qué quiso ambientar la película en los 60, la importancia del tema de la familia y los criterios que utilizó para elegir a los intérpretes de los cuatro superhéroes. Empezando por Pedro Pascal, al que vio en el plató de Juego de Tronos.
Primeros pasos. ¿Por qué este título y qué significa?
Para empezar, sirve para evocar los 60, la carrera espacial y el alunizaje de Neil Armstrong. Salvo que en mi universo los primeros en ir al espacio son los Cuatro Fantásticos, los Armstrong y Buzz Aldrin en su mundo y su tiempo. Son astronautas y exploradores. Luego, es un volver a empezar, porque Sue Storm está embarazada y esta es una película sobre la familia y sobre cómo un bebé se abre camino en una familia muy especial. Y no olvidemos que también se trata de los primeros pasos para llevar a los Cuatro Fantásticos al MCU.
Hablemos de la estética de la película, con sus colores pastel, su arquitectura… ¿Es una forma de alejarse de lo que ya conocíamos y presentar a los personajes desde una nueva perspectiva?
Sí y no. También queríamos hablar de cómics, de Jack Kirby y de Stan Lee. Creo que los Cuatro Fantásticos se lanzaron en los años 60 porque encarnaban el futuro y la carrera espacial, era la época de JFK y del optimismo, y se basan en la idea de que la tecnología, el corazón y la cabeza se ponen de acuerdo para resolver cualquier problema. Algo que también ocurrió con Star Trek. Spock y Kirk están hechos de la misma pasta que Reed y Sue. Y luego está la Guerra Fría, el movimiento por los derechos civiles… El propio Black Panther hace su primera aparición en las páginas de los Cuatro Fantásticos. Es decir, con tanto optimismo y tanta esperanza, me dije, ¿qué necesidad hay de cambiar los personajes, su tono y su dinámica para adaptarlos a un entorno más moderno? Dejémosles en su época con un principio esencial: un futuro brillante y mejor porvenir. Pertenecen a esa época, si no por algo, al menos por ahora.
La película no se centra en los orígenes de los Cuatro Fantásticos, sino en el momento en que adquieren sus superpoderes. ¿Cómo nos permite esta elección abordar los diferentes temas y personajes?
Queríamos adentrarnos en esta familia de superhéroes y explorar sus vidas. Al fin y al cabo, sus orígenes ya se han contado ampliamente en otras películas, la gente ya los conoce. Sabemos quiénes son y lo que pueden hacer exactamente igual que hicimos con la película del Hombre Araña cuando llegó al MCU. La suya es una historia fantástica. ¿A quién no le gusta la historia de Peter, que pasa de ser un estudiante perdedor a Spider-Man tras la picadura de la araña? O la de los Cuatro Fantásticos yéndose al espacio pero, como ya conocemos la narrativa, hemos querido presentarlos cuando ya llevan trajes de superhéroes. Me pareció más interesante mostrarle al público cómo su mundo puede ponerse patas arriba con la llegada de un hijo, algo que es increíblemente importante para una familia. ¿Qué ocurrirá a raíz de este acontecimiento? Esa es la pregunta.
¿Cómo eligió a cada uno de los actores que interpretan a los Cuatro Fantásticos?
Pensé que eran actores maravillosos y extraordinarios por derecho propio, con la capacidad de dar vida a esos personajes de una forma única que honrara sus orígenes en los cómics, pero que también aportara algo nuevo y especial. Y los elegí a todos porque pensé que juntos formarían una familia extraordinaria, en la que veríamos corazón, humor y grandes emociones en una dinámica esencial y fundamental.
Al fin y al cabo, es la primera familia de Marvel.
Lo es. Hay que creer en ellos como familia. En Reed y Sue como pareja. En Johnny y Sue como hermanos. Hay que creer que Ben, Reed y Sue son mejores amigos, y lo mismo Johnny y Ben. Hay que creer en todas estas dinámicas y yo siempre elijo al mejor intérprete posible para un papel. Y tuve una suerte increíble.
Empezamos con Reed.
Era un personaje difícil, con muchas versiones diferentes. Al principio era muy heroico, luego cerebral y solitario, alguien que se mueve en todas direcciones. Necesitábamos a alguien que se sintiera cómodo delante de una pizarra, que pudiera salvar el mundo o destruirlo. Necesitábamos a un personaje de acción, pero también a un marido, padre y mejor amigo. Porque Reed ama a su familia más que a nada y haría cualquier cosa por ella. ¿Quién sino Pedro Pascal? Nos conocemos desde hace 20 años, es un viejo amigo y el único que atesora todas estas facetas. Es un actor maravilloso e increíble, y ya ha demostrado todas estas cualidades en muchos otros papeles.
¿Y Sue Storm?
Vanessa Kirby es una actriz igualmente brillante, con mucho humor y profundidad emocional. Expresa realismo en todo lo que hace y muestra una fuerza única. Sue es un gran personaje que ya ha evolucionado. De niña invisible ha pasado a ser probablemente la más poderosa de todos los Cuatro Fantásticos, tanto que dirige la Fundación Futuro, una especie de ONU con el objetivo de unir al mundo entero. Luego está Ebon Moss-Bachrach en el papel de La Cosa. Siendo neoyorquino, sabemos lo que eso significa, ¿no? Y a Joseph Quinn lo conocí hace años por Juego de tronos. Es un actor brillante, joven y carismático. Puede hacer cualquier cosa, incluso ser la Antorcha Humana.