La versión de ‘Thunderstruck’ de AC/DC que hizo la rondalla de Santa Eulalia de Mos fue la chispa que animó el nacimiento de Rondallas, la película con la que Daniel Sánchez Arévalo regresa al cine.
Javier Gutiérrez, María Vázquez y Tamar Novas encabezan el reparto de esta comedia dramática que se rueda en Galicia.
Por Begoña Piña
Han pasado dos años desde el trágico naufragio de un pesquero que sacudió a un pequeño pueblo marinero. El patrón de aquel barco, uno de los siete desaparecidos en el mar, era el director de la rondalla de Santa Eulalia de Mos. Y ahora, uno de los supervivientes decide que hay que dejar ya el duelo atrás y que lo mejor para conseguirlo es recuperar la agrupación de música tradicional para competir en el concurso anual.
Gaitas y percusión, niños, adultos y ancianos, un centenar de aficionados reunidos en este conjunto musical rodean a los personajes de esta historia, “un relato de superación, de cómo volver a poner en marcha la rondalla ayuda a superar los traumas y ese duelo por el que están todavía pasando, el luto tras ese naufragio que aún está muy vivo para ellos”, explica el director y guionista Daniel Sánchez Arévalo que, con Rondallas, vuelve a la pantalla grande.
María Vázquez, Javier Gutiérrez y Tamar Novas encabezan un reparto completamente gallego en el que participan decenas de músicos aficionados, miembros de las rondallas de la zona donde se rueda y que ahora forman parte de la rondalla de esta ficción. Una agrupación que, más allá del cine, competirán en la vida real en el concurso de rondallas que se celebrará el próximo mes de enero en Vigo.
“Quiero que sea una peli muy pegada a la tierra y al mar, que sea muy representativa de lo que yo vivo aquí, de lo que he visto aquí. Por eso para mí era muy importante que todos los actores fueran gallegos”, añade Sánchez Arévalo, que trabaja con Rafa García en la dirección de fotografía de la película. María Vázquez es una percebeira, viuda del capitán del barco que naufragó y miembro importante de la agrupación musical. Javier Gutiérrez era el mejor amigo del patrón de la embarcación. Y Tamar Novas es un guardia rural. Carlos Blanco, Judith Fernández, Fer Fraga, Xosé A. Touriñan y Marta Larralde completan el reparto del filme. Con ellos, el cineasta ha escogido a algunos de los miembros de la rondalla y los ha integrado en el equipo artístico “con frases”.
“En la película hay muchísimas escenas de exterior porque obviamente si se rueda en un sitio tan maravilloso como A Guarda, pues quieres explotar toda la belleza que te transmite el pueblo. Y luego también por las necesidades de los ensayos de la rondalla, que son unas 100 personas a las que no puedes meter en una sala a ensayar, nos quedaríamos sordos con los tambores, los bombos, las panderetas, las gaitas… En la realidad es que, efectivamente, ellos ensayan siempre en exterior”.
Película con diferentes historias y con mucho diálogo –marca del cineasta–, en ella lo que importa, en palabras del director, “son las historias humanas de dentro de este entorno, los problemas y las cosas que cada uno de ellos está tratando de superar o arreglar o colocar”, dice Sánchez Arévalo que enumera referencias muy claras que ha tenido a la hora de preparar esta película, como Tocando el viento (Mark Herman, 1996) o Full Monty (Pete Cattaneo, 1997).
Todo ello con un espacio privilegiado para la música, “porque al final es lo que va marcando el paso del tiempo, desde que se reúnen por primera vez para empezar a ensayar hasta que terminan en el concurso de rondallas en el IFEVI, que es el recinto ferial de Vigo”. Además, Rondallas hará un guiño a la versión del mítico tema de AC/DC, Thunderstruck, y mostrará la necesidad del grupo de combinar la música tradicional con temas más modernos.
Por último, la película pondrá también el acento en el contexto social, el trabajo de los pescadores, los naufragios, la vida real en un pueblo marinero gallego… “Es una peli muy marítima, en la que hemos rodado con percebeiras trabajando en las rocas, en la que tenemos muchas secuencias que transcurren en la lonja, en el puerto, en barcos… El mar está muy presente. Y, además, nos hemos apoyado mucho en toda la gente local”.
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