Leonardo DiCaprio y Martin Scorsese. Son la dupla creativa de Hollywood por excelencia. Shutter Island y El lobo de Wall Street son dos de sus títulos más celebrados, pero juntos han dejado joyas como Infiltrados o El aviador.

Su última obra juntos, y no sabemos si la última del director, ha sido la reciente Los asesinos de la luna. 

Keira Knightley y Joe Wright. El drama de época es sin duda la especialidad de esta pareja. El director la eligió para Expiación, más allá de la pasión, Anna Karenina y Orgullo y prejuicio. 

“Es profundamente inteligente, en el sentido más nerd de la palabra, disléxica como yo, lo que la lleva a crear otros patrones en los que la gente no pensaría de entrada, lo que nos lleva a un rodaje extremadamente intuitivo», dijo sobre ella en una entrevista.

Mario Casas y Álex de la Iglesia. Hace unos años esta combinación habría parecido inverosímil, pero la espléndida evolución del actor ha convencido al icónico director, que le ha convertido en una cara recurrente en su cine con Las brujas de Zugarramurdi, Mi gran noche y El Bar.

Casas ha sabido encajar a la perfección en el bizarro imaginario de Álex de la Iglesia. 

Jennifer Lawrence y David O. Russell. Esta pareja artística es tan efectiva que la actriz ha estado nominada al Oscar por todos los trabajos que ha desarrollado junto a él hasta la fecha, desde que se conocieron en El lado bueno de las cosas. 

Ganó el Oscar por su interpretación de Tiffany Maxwell: «Soy una víctima de su escritura» , dijo en una entrevista.

Samuel L. Jackson y Quentin Tarantino. Desde un primer contacto en Pulp Fiction no han parado de hacerse crecer el uno al otro. Los odiosos ocho o Django desencadenado confirmaron que se necesitaban y ningún otro actor ha sabido entender el mundo de Tarantino como él. 

Geraldine Chaplin y Juan Antonio Bayona. La actriz de Hable con ella ha tenido sitio en varias películas dirigidas por éste hasta la fecha, la última vez en Jurassic World: El reino caído. 

El cameo de la actriz ya es un clásico del director. 

Penélope Cruz y Pedro Almodóvar. La unión cinematográfica más querida y reconocida de nuestro país. La primera vez que trabajaron juntos fue en Carne Trémula con un brevísimo papel de la actriz.

Después llegaron Todo Sobre mi Madre, Volver, Los Abrazos Rotos, Los Amantes Pasajeros, Dolor y Gloria y Madres Paralelas. 

Dos carreras inseparables.

Julianne Moore y Todd Haynes. Safe cruzó sus caminos por primera vez en 1995 y desde entonces él no ha querido separarse de ella. 

Ha vuelto a elegirla para Lejos del cielo, I’m Not There y Wonderstruck. La última vez ha sido este mismo año presentando May December en Cannes.

Anne Dorval y Xavier Dolan. El director contó con ella en su debut y desde entonces se ha convertido en su musa. Los amores imaginarios y Mommy son solo dos de sus grandes colaboraciones. 

Sus títulos juntos son innumerables y su relación hace tiempo que traspasó lo profesional.

Johnny Depp y Tim Burton. Casi es difícil mencionar un título en la carrera del director que no implique la participación de Johnny Depp. A estas alturas ya es inimaginable ponerle otra cara a los extravagantes personajes de las películas de Burton. 

Eduardo Manostijeras, Sombras tenebrosas, Sleepy Hollow o Ed Wood, son solo algunos de los más recordados.