Arnold Schwarzenegger, que acaba de estrenar en Netlix la serie de acción FUBAR y el documental sobre su vida en tres partes Arnold, ha tenido una carrera llena de éxitos. Sin embargo, una de sus principales espinitas, tal como él mismo ha reconocido, fue el tremendo fracaso en taquilla de El último gran héroe, la película de John McTiernan (Depredador, Jungla de Cristal) de 1993.
«No puedo expresar lo disgustado que estaba«, asegura Schwarzenegger en la docuserie Arnold. «Te duele. Te hiere los sentimientos. Es vergonzoso… No quise ver a nadie durante una semana. Pero sigues adelante. Y mi suegra también lo decía todo el tiempo: ‘Sigamos adelante’. Es un gran mensaje».
En la película, una comedia de aire metacinematográfico sobre el propio cine de acción, Schwarzenegger interpretaba al héroe de acción ficticio Jack Slater, que entablaba amistad con un joven aficionado al cine, Danny (Austin O’Brien), quien, al comienzo de la película, era transportado mágicamente al mundo ficticio de Slater.
Con un presupuesto de 85 millones de dólares, El último gran héroe se estrenó con 15,3 millones de dólares en la taquilla nacional, terminando su andadura mundial en los cines con un total de 137 millones de dólares, cifra que quedaba muy lejos de las películas protagonizadas por Schwarzenegger en aquella época.
«Cuando se estrenó El último gran héroe yo había alcanzado mi punto álgido después de Terminator 2, con la película de más éxito del año en todo el mundo […] Terminator 2: El Juicio Final ganó 31,8 millones de dólares en la taquilla nacional en su fin de semana de estreno, y terminó con un total de 520,9 millones de dólares en todo el mundo. En su momento, fue la tercera película más taquillera de la historia, tras La guerra de las galaxias y E.T. el extraterrestre.
En la docuserie de Netflix, el director de Terminator, James Cameron, recuerda su primera conversación con Schwarzenegger tras el estreno en cines de El último gran héroe. «Parecía que estaba en la cama llorando», asegura Cameron. «Se lo tomó como un duro golpe a su marca. Creo que le sacudió de verdad… Le dije: ‘¿Qué vas a hacer?’ Me contestó: ‘Voy a pasar el rato yo solo’. Es la única vez que le he oído decaer«.
Fuente: Variety
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