El equipo de la polémica película Sound of Freedom, que llegará a los cines españoles el próximo 11 de octubre, ha guardado silencio sobre las nuevas acusaciones de acoso contra Tim Ballard, al que Jim Caviezel, protagonista del filme, representa como un héroe en la película.
Ballard, fundador del grupo contra el tráfico de menores Operation Underground Railroad (O.U.R.), alcanzó nuevos niveles de notoriedad este verano cuando la película se convirtió en un tremendo éxito tras recaudar más de 182 millones de dólares en Estados Unidos y 210 millones en todo el mundo.
Ayer, lunes 18 de septiembre, un informe de Vice News detalló acusaciones anónimas contra Ballard relacionadas con su silenciosa salida a finales de junio de O.U.R., que lanzó en 2013. Su marcha se produjo cuando el director de la película, Alejandro Monteverde, y Angel Studios preparaban el estreno de la película para las vacaciones del 4 de julio.
Ballard, ex funcionario del Departamento de Seguridad Nacional, se embarcó en misiones encubiertas en el extranjero para luchar contra el tráfico de niños al iniciar O.U.R. Según Vice, llevó a mujeres para que se hicieran pasar por su esposa en estas misiones y supuestamente las obligó a compartir la cama o la ducha con él bajo el pretexto de que estos comportamientos eran necesarios para engañar a los traficantes de niños.
Vice también informó de que una empleada de O.U.R. que viajó con Ballard en una misión en el extranjero presentó una denuncia por acoso sexual contra él. La productora Monteverde no respondió el lunes a una solicitud de comentario por parte del medio The Hollywood Reporter; tampoco Angel Studios ni el propio Ballard.
En una columna publicada el 14 de agosto en el medio The Hollywood Reporter, el director Monteverde y el coguionista Rod Barr escribían: «Cualquiera que haya visto Sound of Freedom sabe que la película en sí no tiene nada de política. Está basada en la historia de una persona real, Tim Ballard, que dejó su trabajo en Seguridad Nacional para rescatar a niños víctimas de la trata. En el desarrollo, investigación y escritura de la historia, no recordamos ni una sola conversación con Tim sobre política. ¿Por qué? Porque las ideas políticas personales deberían ser irrelevantes cuando se rescata a niños de la trata de seres humanos«.
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