Los fiscales están buscando documentos entre Rust Movie Productions y Alec Baldwin, así como en su productora El Dorado Pictures. Los registros podrían ayudar a Hannah Gutierrez-Reed, acusada de homicidio involuntario y manipulación de pruebas en el tiroteo mortal del director de fotografía de la película, cuando se disparó una pistola que el actor tenía en la mano.
La mujer ha alegado que los productores le impidieron realizar adecuadamente su trabajo y que, según ella, le denegaron la formación adicional en el uso de armas de fuego por motivos económicos.
Jason Bowles, abogado de Gutiérrez-Reed, dijo en un comunicado que Rust Movie Productions «tiene que dejar de tratar de esconder la pelota y tiene que ser transparente y comunicativa con la información».
Los cargos contra Baldwin fueron desestimados en abril aunque los fiscales dijeron que podrían volver a presentarse a la espera de los resultados de una investigación sobre si el arma que se disparó estaba modificada. Un experto forense emitió un informe en septiembre que chocaba con la versión del incidente de Baldwin, quien ha mantenido que él no apretó el gatillo.
Según los expedientes judiciales, la citación se emitió en agosto, cuando el abogado de Gutiérrez-Reed alertó a los fiscales de las circunstancias que rodeaban la producción y que, según él, eran relevantes para el caso penal de su cliente. Rust Movie Productions se opuso a la citación.
Argumentó que los fiscales están llevando a cabo una «evidente expedición de phishing» con el objetivo de acusar a Baldwin, y que están buscando «materiales privilegiados y protegidos» que requieren la revelación de secretos comerciales y otra información confidencial.
Entre las normas de seguridad de la industria que podría haber infringido figuran la descarga intencionada de un arma de fuego aunque la escena que estaba ensayando no lo requiriera y la aceptación del arma por parte del ayudante de dirección Dave Halls en lugar de por el armero, que se supone que debe entregarla después de mostrar que las recámaras están vacías, según los boletines de seguridad recomendados por el Comité de Seguridad Sindical de la Industria.
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