Basada en la novela más vendida de James Clavell, la serie histórica se sitúa en el Japón medieval y sigue el ascenso de Lord Yoshii Toranaga, que lucha por su vida mientras sus enemigos se alían contra él. Su destino se entrelaza con el de John Blackthorne, un inglés portador de secretos que podrían ayudar a Toranaga a cambiar las tornas del poder, y Toda Mariko, una misteriosa noble cristiana, la última de un linaje caído en desgracia. Si esta serie ha despertado tus ganas de historias de disfraces con ambientación asiática, hoy te presentamos la contrapartida de Shōgun , que también te mantendrá ocupado durante mucho tiempo, con sus impresionantes 50 episodios. Se trata de Six Flying Dragons, un k-drama de género histórico, de acción y drama político, ambientado también en la época medieval.
Al igual que Shōgun, seis dragones voladores es un relato ficticio de los acontecimientos históricos reales que provocaron profundos cambios en el país. Narra la fundación de la dinastía Joseon, un reino coreano que tomó el poder en 1392 y duró unos cinco siglos. En el centro de la historia están los conflictos ideológicos y las ambiciones de seis personajes, siendo los principales el príncipe Yi Bang-won (Yoo Ah-in), futuro rey Taejong, que aspira al poder absoluto, y su mentor Jeong Do-jeon (Kim Myung-min), que en cambio quiere un país gobernado por ministros.
Entre guerras, intensas escenas de acción, intrigas palaciegas e increíbles localizaciones, la serie suele citarse como uno de los mejores dramas de costumbres jamás producidos en Corea del Sur. Con su historia de ascenso al poder desde la perspectiva de algunas de las figuras políticas más influyentes de la época, es realmente la serie perfecta para ver después de terminar Shōgun.
