La serie Monstruos: la historia de Lyle y Erik Menéndez continúa entre las más vistas de Netflix. El caso de los dos hermanos que mataron a sus padres vuelve a estar de actualidad, con un paso de la pequeña pantalla a la realidad entre críticas y acusaciones de tergiversar a los protagonistas y la historia. Entre los aspectos que más están intrigando a los aficionados al true crime está el del escenario y la casa donde fue asesinado el matrimonio Menéndez.
El asesinato de José y Kitty, en la serie interpretados por Javier Bardem y Chloë Sevigny, tuvo lugar en 1989 en la mansión de Beverly Hills a la que la familia se había mudado tres años antes, después de que su padre se convirtiera en consejero delegado de Artisan Entertainment. Durante el juicio se difundieron imágenes de esa casa, pero ahora la propiedad vuelve a estar de moda.
Según informay ha publicado la web la web Realtor, a pesar de su mala fama, en marzo de 2024, 28 años después del asesinato de Menéndez, el chalé se revendió por 17 millones de dólares. Un aumento de precio asombroso, teniendo en cuenta que en la década de 1980 se había comprado por 4 millones de dólares. Al parecer, permaneció en el mercado sin venderse durante años. La villa, construida originalmente en 1927 y reformada en 1984, tiene una superficie de unos 840 metros cuadrados, es de estilo mediterráneo y está situada en Elm Drive (bajo el famoso código postal 90210).En el interior hay siete dormitorios, nueve cuartos de baño y en el exterior hay una pista de tenis, piscina y un anexo para invitados. Originalmente puesta a la venta por casi 20 millones de dólares, fue vendida por Sam Delug, el hombre que la compró en 2001, pero por sólo 3,7 millones.
El agente inmobiliario que se encargó de la obra en 1984, Mark Slotkin, jugó un papel importante durante el juicio: testificó que la casa estaba equipada con un sistema de insonorización, lo que ensombreció las palabras de una asistenta, que aseguró haber oído discutir a la familia. Un ejemplo más de cómo Monstruos, como recientemente Mi pequeño reno, puede pasar de la pequeña pantalla y el catálogo de Netflix a la realidad y viceversa.
La web Realtor, no solo ha profundizado en la historia, si no que ha publicado varias imágenes de la casa real donde sucedió todo:
